Aprovechando que aún nos quedaban unos pimientos del huerto del pueblo de mi chico, la semana pasada nos animamos con esta ensalada de pimientos asados, patatas y gambas al ajillo. Receta que no dejará indiferente a nadie.
También os ayudará si tenéis comida o cena en casa ya que preparada el día anterior es perfecta para poner de entrante.
INGREDIENTES:
– 4/5 patatas medianas
– 1 pimiento verde de asar
– 3 pimientos rojos de asar
– aceite de oliva
– sal
– 200 g de gambas peladas frescas o congeladas
– 4 dientes de ajo
– 1 guindilla cayena
– 2 huevos
– agua
ELABORACIÓN:
Precalentamos el horno arriba-abajo a 200ºC.
Cuando el horno haya alcanzado la temperatura, ponemos a asar los pimientos; para ello los lavamos y secamos bien y los colocamos en una bandeja de horno. Salamos y añadimos un poquito de aceite de oliva.
Los dejamos 15 minutos. Después damos la vuelta a cada pimiento y los dejamos otros 15 minutos más. La rapidez en asarse dependerá del tipo de horno y del tamaño de los pimientos.
Mientras se asan los pimientos, nos ponemos con las patatas. Cocemos las patatas bien lavadas y con la piel en abundante agua con sal. Pinchamos las patatas con un palillo o tenedor y cuando estén sueltas las retiramos y las dejamos enfriar en agua fría.
Una vez frías, las pelamos y las cortamos en rodajas algo gruesas. Colocamos las rodajas en la bandeja donde vayamos a presentar la ensalada ya que las patatas serán nuestra base. Salamos por encima de cada rodaja.
Una vez que tenemos los pimientos asados los envolvemos con papel de aluminio y los dejamos así unos 10-15 minutos. Después los pelamos y partimos en tiras. Reservamos el aceite que haya soltado de asar los pimientos.
Ponemos a cocer los huevos en una cacerola con agua y un chorrito de vinagre. Cuando estén los pelamos y los partimos por la mitad.
En una sartén ponemos aceite de oliva a calentar para dorar los ajos fileteados, cuando estén dorados añadimos las gambas bien escurridas. A continuación le añadimos la guindilla y salamos al gusto. Dejamos unos minutos y agregamos los pimientos asados ya cortados en tiras con todo el jugo de asar que habíamos reservado. Esperamos a que reduzca un poco para que se mezclen los sabores.
Esto lo añadimos por encima de la base de patatas cocidas y ya tenemos nuestra ensalada. Por último colocamos las mitades de los huevos cocidos.
Podemos tomarla templada tal cual o fría aliñándola con una pizca de aceite de oliva y vinagre de vino según se prefiera.