Yo siempre había hecho los aros de cebolla de manera tradicional, enharinando primero y friendo después… pues bien, un día en un programa de televisión de recetas explicaron un truco para que los aros de cebolla queden aún más crujientes, dejarlos enfriar en leche antes de rebozar. Lo hemos probado y efectivamente, de esta forma, la harina se pega mucho mejor y quedan exquisitos.

Una vez listos nuestros aros de cebolla crujientes, si les ponéis ketchup estilo americano sin gluten os encontraréis con un sabor muy parecido al de los aros de cebolla glutaneros del VIPS, que yo aún recuerdo.

Como picoteo es perfecto, así que os dejo la receta.

INGREDIENTES:

– 3 cebollas pequeñas tipo francesa

– leche (semidesnatada de Hacendado)

– harina sin gluten (en este caso Farina de la marca Schär) (SELLO FACE)

– aceite de oliva

– sal

– ketchup sin gluten (Heinz)

ELABORACIÓN:

Pelar las cebollas e ir sacando los aros sin romperlos.

Introducimos los aros en un bol con leche y lo dejamos enfriar en la nevera como mínimo media hora.

Una vez fríos, pasamos cada aro por la harina sin gluten, colando el sobrante de harina en un colador.

Una vez enharinados, freímos los aros en abundante aceite de oliva.

Emplatamos en un bol con papel absorbente. Salamos al gusto y añadimos ketchup por encima.