Llevaba tiempo con ganas de hacer sepia guisada con patatas y hoy por fin la comimos. Quedó exquisita,  justo en su punto y con un sabor… bueno no, lo siguiente 😉

Es muy fácil de hacer, lo más importante es no alterar el orden en que se tiene que incorporar cada ingrediente y no tener prisa. Esta receta necesita algo de tiempo.

Probarla porque si queréis sorprender a alguien con una comida o cena especial, lo conseguiréis.

INGREDIENTES:

– 2 sepias medianas

– 1 pimiento verde

– 1 cebolla o cebolleta grande

– 1 tomate maduro

– sal

– 4 dientes de ajo

– 4 patatas medianas

– pimentón dulce apto (El Ángel)

– 3 hojas de laurel

– aceite de oliva virgen extra

– caldo de pescado casero sin gluten o de brick apto (Aneto)

ELABORACIÓN:

Ponemos aceite de oliva virgen extra en una cacerola ancha y cuando esté caliente echamos las sepias limpias y troceadas. Le damos unas vueltas hasta que la sepia coja un color más blanco hueso.

Después, incorporamos el pimiento, la cebolla y los ajos, todo ello cortado en daditos pequeños, salamos al gusto y lo rehogamos a fuego medio durante 10 minutos.

Tras esos 10 minutos incorporamos el tomate pelado y picadito y las hojas de laurel lavadas y lo dejamos otros 10 minutos más removiendo de vez en cuando.

A continuación, añadimos las patatas cortadas en trozos, mezclamos todo muy bien unos minutos e incorporamos una cucharada grande de pimentón dulce.

Mezclamos de nuevo y ponemos caldo de pescado hasta cubrir bien las patatas.

Dejamos unos 25-30 minutos cociendo todo a fuego medio hasta que las patatas se hagan, controlando que no falte caldo y con cuidado que no se nos agarre.

Rectificamos de sal si fuera necesario y servimos caliente.