A veces la coliflor por su olor, color y textura es una verdura que apetece poco comer.
Prueba la coliflor rebozada, seguro que así apetece mucho más, sobre todo a los más pequeños de la casa. A nosotros nos encanta 😉
INGREDIENTES:
– 1 coliflor fresca o 1 bolsa de coliflor cortada en ramitos congelada
– agua
– sal
– harina sin gluten (esta vez harina de garbanzo apta, de Hacendado)
– 2 huevos
– aceite de oliva
ELABORACIÓN:
Cortamos en ramitos toda la coliflor y la lavamos muy bien. Preparamos una cazuela con agua y sal y cuando el agua empiece a hervir introducimos los ramitos y dejamos que cueza hasta que estén tiernos.
Los sacamos de uno en uno para que no se rompan y los ponemos a escurrir.
Si utilizamos la bolsa de coliflor congelada, en 10 minutos en agua hirviendo con sal estará lista.
Una vez escurridos, salamos cada ramito algo más y rebozamos primero en harina sin gluten y después en huevo batido.
En una sartén con abundante aceite freímos los ramitos rebozados. Procuramos hacerlo con el fuego no demasiado fuerte, para que no se nos quemen demasiado. Tienen que quedar dorados.
Escurrimos en papel absorbente y servimos bien caliente.